El acné es un problema que sufren más de ocho millones de españoles, según datos de la Academia Española de Dermatología y Venereología. Está claro que es una dolencia masiva que genera graves conflictos a nivel físico, pero también desde un punto de vista psicológico.
Este tipo de afección, por otra parte, suele presentarse más frecuentemente en el caso de las mujeres frente a los hombres y se muestra de manera usual con los cambios hormonales que acompañan a la llegada de la pubertad, es decir, en torno a los 14 y 16 años.
Sabemos lo sumamente molesto que puede llegar a ser el acné, así que desde la Botica de Guardia hemos querido dejarte una serie de consejos para ayudarte a prevenir y reducir el acné:
1. Lávate con mucho cuidado
Tanto si sufres como si no de acné, es esencial tener la cara bien lavada. Dos veces al día con productos concretos para pieles grasas y sin restregar puede generar grandes resultados positivos. Es muy importante hidratar el rostro una vez lavado con geles o cremas que sean correctos para tu tipo de piel. No olvides desmaquillarte siempre al término del día.
2. No debes tocarte el cutis
Recuerda que rascarte o tratar de quitarte los granos del acné lo único que puede hacer es empeorarlos, y, como resultado, obtener cicatrices o manchas oscuras en la piel. Es muy probable, además, que las manos con las que te toques, que suelen incorporar bacterias, puedan producirte una infección.
3. Límpiate el cutis, pero con cuidado
Si bien es cierto que existen múltiples mascarillas y productos cosméticos especiales para la limpieza del acné y para la eliminación de la obstrucción de los poros, debes llevar mucho cuidado a la hora de usarlos, especialmente debes comprobar que para tu tipo de acné sean beneficiosos consultando con tu médico.
4. Cuidado a la hora de elegir cosméticos
Las personas cuyo cutis sean de tendencia grasa es importante que, a la hora de escoger cosméticos, lo hagan evitando aquellos que tengan una base aceitosa, y, sobre todo, los que incluyan este aviso: «no comedogénicos», ya que obstruyen los poros del cutis.
5. Ojo con el sol
Si bien es cierto que el sol, en su justa medida, puede ayudar con el acné, también puede provocar el efecto rebote y empeorar la situación agravando el problema. También debes tener en cuenta que tanto los rayos ultravioleta como radiación infrarroja A (IR-A) son los responsables de graves daños en nuestra piel a corto y largo plazo. Todo esto hace que sea imprescindible el uso de cremas de protección solar para pieles grasas.
6. Mantén tu pelo limpio con frecuencia
El pelo debe limpiarse con regularidad, sobre todo si es graso, ya que si no lo lavamos, la grasa del cabello pasa a instalarse en nuestra piel al estar en contacto directo.
7. Sí a las dietas equilibradas
Los alimentos juegan un papel protagonista en la salud de nuestra piel, por eso es esencial que sigas una dieta equilibrada evitando los alimentos con elevado índice glucémico y repletos de grasas saturadas.
8. Sé constante en los tratamientos
Un tratamiento médico, en este caso para el acné, requiere paciencia a la hora de avistar resultados. Para ello, es absolutamente esencial que conserves la calma y seas constante a la hora de seguirlos, ya que son el camino para deshacerte de esa molesta afección para siempre.